10 cosas que deberías hacer después de comprar tu vestido de novia
Tener el vestido perfecto es una de las mayores preocupaciones de las novias. Están atentas a las tendencias y los consejos, sin embargo, una vez comprado, todavía quedan algunos pendientes para completar el look de novia y cuidar del vestido.
Primero estuviste atenta a los consejos para elegir el vestido de novia. No resultó sencillo pero llegó el momento en que lo descubriste. Una vez comprado, probablemente te preguntes cómo continuar. Los nervios lógicos ante los preparativos del vestido de novia con encaje, el contrato de los proveedores y la confirmación de asistencia de las invitaciones de bodas no te abandonan. Por eso te dejamos una lista de cosas para hacer después de comprar el vestido.
1. Comprar los zapatos
Cuando tengas el vestido de novia sencillo, es momento de pensar en los zapatos. También es recomendable tenerlos para las pruebas y, así, tomar el largo perfecto, sin que arrastre el vestido o quede algo corto. Luego, para evitar molestias con los zapatos, debés caminarlos un poco cada día para acostumbrar los pies al modelo y el taco.
2. Buscar los accesorios
Los complementos giran en torno al corte y tono del vestido. Las joyas establecen un vínculo especial con el tipo de escote. Luego el tocado requiere encontrar un equilibrio con las joyas y el vestido de novia. Si sos una novia romántica, tendrás en el velo una alternativa más entre los accesorios para ligar con el peinado recogido con trenzas.
3. Incorporar “algo azul”
Para novias supersticiosas, la buena fortuna viene con la tradición de los cuatro elementos. Llevar “algo azul” en el atuendo de novia es parte de la cábala más encantadora. Puede ser algo llamativo como un lazo azul o zapatos azules, o más discreto como aros con piedras azules o un bordado o una cinta debajo del vestido de novia.
4. Probar peinados
Existen los peinados recogidos para recepción, más cuidados y prolijos, moños bajos y moños altos que favorecen un estilo más pulido y sobrio. Luego, los peinados semirecogidos, una combinación entre cabello suelo y peinado recogido recomendada para estilos más desenfadados. Debés dedicarle espacio a la búsqueda del peinado ideal, lo que llevará un tiempo de pruebas y errores.
5. Encontrar la lencería perfecta
Lo ideal es que puedas tener tu ropa interior para las pruebas, pero si no es posible, considerá cuál deberías comprar que no marque ni se transparente, sobre todo si el vestido es de crepé o seda. En tanto, si buscás un poco de volumen para el pecho o un corpiño sin breteles, es mejor que lo tengas para el momento de los retoques finales.
6. Saber cómo ponerte el vestido
Dependerá de la estructura del vestido, no resulta lo mismo colocarse un vestido princesa de faldas complejas que un vestido puesto desde arriba con un cuidado especial en el peinado y el maquillaje, o un vestido de novia usado de caída sencilla. ¿Quién te ayudará a vestir o cómo trabajar en equipo para acomodar todas las capas de tules con paciencia y hacerlo a tiempo?
7. Elegir el ramo de novia
Es recomendable llevar una foto del vestido cuando vayas a la floristería a encargar tu ramo de novia. Por ejemplo, un vestido de corte A es bastante versátil y combina con ramos redondos o ramos en caída. Otro ejemplo diferente es un vestido de corte princesa, con una falda más voluminosa, que prefiere un ramo grande que no se pierda entre tantas texturas.
8. Comer sano y hacer actividad física
No se trata propiamente del vestido de novia pero sí de algunos consejos sobre vida sana para que puedas lucir el corte y sentirte como una reina. Una dieta baja en azúcares refinados y grasas procesadas y con la porción adecuada de hidratos de carbono es una recomendación que se aplica a toda persona que se proponga una alimentación saludable. La actividad física es otra aliada de la vida sana.
9. Buscar dónde guardar el vestido
Muchas novias no quieren que nadie vea el vestido, menos aún el novio. Hay tiendas que los guardan hasta el día previo a la boda, o si lo hiciste a medida, la modista o el diseñador puede guardarlo hasta que llegue el día. En todo caso, si esto no fuera posible, es necesario encontrar un sitio adecuado para guardarlo, sin que corra ningún tipo de riesgo, conservado en la caja y en un lugar seco y fresco.
10. Guardar el secreto
Hay sorpresas que se deben guardar hasta el día del casamiento. Quizá el vestido de novia deba ser el secreto mejor guardado. Tratá de no develar el misterio porque la entrada de la novia es uno de los momentos más esperados. Fueron muchos meses de ansiedades, primero en la elección, después en los ajustes, que no hay nada más bonito que sentirte bella y admirada.
Escuchá tu corazón y disfrutá cada momento del proceso. El look de novia se va completando de a poco. Comenzá a explorar las tortas de casamientos, las alianzas de matrimonio y los souvenirs originales. ¡Hay mucho por hacer!
