¡Nos comprometimos! ¿Por dónde empezar a organizar el casamiento?
Llegó el compromiso, y un tiempo de ilusiones, emociones y ansiedades. Aunque este año estuvo lleno de incertidumbre, planificar el día más importante pensando en el futuro es un momento para disfrutar. Arranquemos por los puntos esenciales.
Luego de la hermosa noticia del compromiso de bodas, llega un tiempo de organización y puesta de manos a la obra. Es un motivo de mucha alegría con toques de ansiedad que se van sumando día a día. ¿Por dónde comenzar? Es la primera pregunta que les surge a los novios que se aventuran a explorar con más curiosidad menús, salones, peinados de novia, trajes de novio, imágenes de souvenirs para casamiento, zapatos y accesorios e invitaciones de bodas. Aquí, los tres puntos principales.
1. Un presupuesto estimativo
Ante el proyecto de casamiento, lo primero que viene a mente es el presupuesto necesario para llevar adelante una boda, sin perder la calma frente a los valores que se manejan hoy en día. Algunos querrán tirar la casa por la ventana, otros se inspirarán en bodas más íntimas para buscar su propio estilo, pero lo cierto es que es muy importante definir desde el inicio cuáles serán las prioridades y las categorías para todos los complementos nupciales, como el alquiler del salón, el menú, la decoración, la torta de casamiento original o los accesorios del look de novios.
Cuando comienzan con la planificación de la boda y el bosquejo del presupuesto, definir la cantidad de invitados es el primer paso. De ello dependerá cuál sea el sitio que elijan para celebrar y el menú que ofrecerán a los invitados. Son dos factores que juegan un papel preponderante en toda la organización, desde los costos hasta la valoración de la boda en su conjunto entre sus invitados y conocidos.
2. La fecha de casamiento
Comenzar a pensar una fecha para el casamiento trae aparejadas ciertas cuestiones prácticas para acertar en la decisión. Entre ellas, por ejemplo, algunas parejas evalúan la estación del año. Casarse en época estival los puede hacer relacionarse más con la naturaleza y los eventos al aire libre. Los preparativos del casamiento tienden a acomodarse mejor, como las flores de temporada o los souvenirs originales. El clima más agradable es sensacional, pero no quita que una boda invernal sea también genial.
Otro tip ventajoso es el calendario de invierno con mayor disponibilidad. Así van a poder combinar la fecha de la boda religiosa con la reserva del salón de manera más sencilla. Elegir el invierno también les asegura una mayor concurrencia de invitados porque las agendas suelen estar menos cargadas y tampoco se enciman las vacaciones de verano. Por otro lado, seguramente la celebración será en un lugar cerrado, por lo que no deberán preocuparse tanto por las variables climáticas.
3. El estilo de boda
¿Cómo piensan el casamiento, qué detalles preciosos quieren resaltar? Quizá sueñen con una boda en el campo o una estancia, un casamiento de estilo industrial con luces blancas suspendidas, una boda más nostálgica o vintage con mobiliario antiguo, un enlace romántico que pone el foco en los arreglos florales, o les tire más el modo casual de una boda boho chic al atardecer. Hoy en día los novios ya tienen una idea bastante clara de las tendencias de decoración.
El horario del evento también influye en las opciones de estilo. Por ejemplo, una boda nocturna tiende a lo clásico, con vestuarios más solemnes, vestidos elegantes para fiestas y trajes de etiqueta. Si eligen las primeras horas del día o el mediodía, son muy románticas las bodas veraniegas, en que la protagonista puede lucir un vestido de novia corto y cómodo. Las bodas diurnas son más elásticas para adaptarse a distintos estilos de casamiento.
No tarden mucho en visitar locaciones y casas de vestidos de novia y exploren catálogos de tarjetas de casamiento. Recuerden que internet es el mejor aliado para armar una agenda de tareas y llevar un control de los gastos. ¡Ya comienzan a transitar un tiempo lleno de ansiedades pero único en emociones!