Cindy y Santi: un día de campo, risas y ¡mucho amor!

Cindy y Santi se conocieron, como muchas otras parejas, por amigos en común. Sin embargo, su historia no es como cualquier otra. El amor que sienten el uno por el otro es muy especial. Por eso, en su casamiento quisieron reflejar en cada detalle el compañerismo y el amor que los une. ¡Y no podrían haberlo conseguido mejor! Tanto el lugar de la celebración, como la ceremonia y cada rincón de su casamiento estuvieron llenos de magia y luz.

Una propuesta que llegó en el momento indicado

Cuando hacía un año que estaban juntos, fueron de vacaciones a Colonia, Uruguay. Allí, Santi le preguntó a Cindy si quería pasar el resto de la vida a su lado. 4 años después, el 11 de marzo de 2017, sellaron su amor con una preciosa ceremonia al aire libre, bajo la calidez y la frescura de los árboles, que dieron al momento un aire 100% romántico. El reportaje fotográfico estuvo a cargo de Ali Alonso Fotografía.

El escenario perfecto para una boda de día

Tanto la ceremonia como la fiesta fueron en el mismo lugar: la estancia Don Manuel, un espacio ideal para una boda con toques rústicos y campestres.  La decoración que eligieron no podría haber sido adecuada: un altar creado sobre un antiguo árbol con telas blancas enmarcó la emotiva ceremonia. El toque de color lo aportaron las sillas de los invitados, decoradas con cintas violetas, naranjas, amarillas y verdes.

Además, los novios incluyeron detalles personalizados en diferentes rincones de la fiesta, dándole a toda la ambientación un toque original y diferente: un divertido photocall en medio de los árboles, banderines de colores decorando la pista de baile y una naked cake para deleitar a los invitados fueron algunos de los elementos que más destacaron.

El look de los novios

Del mismo modo que la decoración, Cindy y Santi eligieron un look bien relajado. Ella eligió un vestido con mucha caída, con detalles en encaje y una espalda con escote pronunciado. Llevó el pelo recogido, dándole un toque romántico a su peinado con unas delicadas flores de colores claros, y lo complementó con un ramo de flores pequeñas en color rosa y blanco. Santi, por su parte, usó un traje azul, a juego con una camisa con rayitas azules y blancas, y moño también azul. Los zapatos y tirantes elegidos fueron marrones, complementándose perfectamente con el estilo del lugar y el look de la novia.

Pista al aire libre, ¡diversión asegurada!

Aprovechando la luz y el espacio abierto que les ofrecía la estancia, los novios decidieron que la pista de baile también fuera afuera. Hubo mucho baile, risas e incluso una guerra de espuma, ¡al mejor estilo carnaval!

Y como en toda fiesta, no podían faltar las buenas anécdotas. Cindy cuenta que, al momento de tirar el ramo a las solteras, este se quedó colgado en un árbol. Luego de varios intentos, el chico encargado de la filmación consiguió bajarlo… ¡con un trípode!

Cuando la boda es un reflejo de la pareja

Los novios quisieron desde el primer momento que sus invitados disfrutaran y pasaran un día relajado. ¡Y así fue! Destacan especialmente el esfuerzo de su familia y amigos, que los ayudaron a hacerlo posible. Y nos regalan un versículo que los define a ellos y lo que fue su increíble boda: “El amor es paciente y bondadoso. El amor no es celoso ni fanfarrón ni orgulloso ni ofensivo. No exige que las cosas se hagan a su manera. No se irrita ni lleva un registro de las ofensas recibidas. No se alegra de la injusticia sino que se alegra cuando la verdad triunfa. El amor nunca se da por vencido, jamás pierde la fe, siempre tiene esperanzas y se mantiene firme en toda circunstancia. El amor que se construye así, dura para siempre”

¡Felicidades a los flamantes esposos!