¡Complementá tu look nupcial con unos guantes de novia!

Conjuntar tu vestido de novia con un complemento como los guantes es un poco difícil, pero no imposible. Es importante que tengas en cuenta que dicho complemento debe ser igual o tener los mismos detalles que tu vestido de novia, para conseguir armonía en su combinación, ya que no querrás quitarle protagonismo al verdadero protagonista de esta historia: tu hermoso vestido elegido para este momento tan especial.

Las novias que apuestan por vestidos vintage suelen ser las principales en elegir este tipo de complemento para su gran día. Hermosos guantes blancos que otorgan un aire antiguo y que recuerdan los años 50, época en la que estaban en auge. Su fama fue decayendo con el paso del tiempo, pero hoy en día, las novias más románticas lo tienen en su lista de imprescindibles para el casamiento.

¿Con qué vestidos combinan mejor? 

Tres son los aspectos a tener en cuenta para elegir los guantes perfectos: el tipo de vestido de novia, la longitud de las mangas y la largura de tu brazo. En cuanto al tipo de vestido, los que combinan perfectamente con este complemento son aquellos que tienen escote palabra de honor, escote corazón, cuello halter o breteles finos.

¿Cómo tengo que llevarlos?

Con respecto a la longitud de las mangas del vestido de novia, es sabido que cuánto más corto sean, más largo serán los guantes. Pero, hay una excepción: si tus brazos son cortos, no uses guantes largos, intentá que estos te lleguen hasta el hueso de la muñeca porque de lo contrario, se verán más cortos de lo que verdaderamente son; si tus brazos son largos, no vas a tener ningún problema en usar unos del mismo tamaño. Además, no solo complementan, sino que también estilizan los brazos.

Los guantes de novia y su protocolo

• Si te casás en una ceremonia religiosa y optaste por llevar unos hermosos guantes conjuntados a la perfección con tu precioso vestido de novia, tenés que saber que no podrás ir por el pasillo hacia el altar con ellos puestos, pues tendrás que quitártelos antes de entrar a la iglesia y no podrás volvértelos a poner hasta que salgas de ahí.
• Si se trata de una ceremonia civil, podés lucirlos perfectamente desde el minuto uno. El único momento que tendrás que quitártelos, si no has elegido un guante que te permita dejar al aire libre las manos sin tener que retirarlo por completo, es en el intercambio de anillos. ¡Procurá pasárselo a alguna amiga o a tu testigo para que este no se manche!
• El banquete es otro momento que no tenés que llevarlos puestos. Pero, no podés olvidarte de ellos para entrar a la fiesta o abrir el baile con tu marido; son buenas ocasiones para lucirlos.
• ¡Atención! Si tenés cortejo nupcial sería bueno que ellas, las damitas, también los llevarán. Pero eso sí: deben ser más cortos que los tuyos y del color de sus vestidos.

Apostar por este tipo de complemento otorgará a tu look nupcial sofisticación, belleza y elegancia. Son perfectos para novias románticas y vintage, pero si no te sentís identificada con esos estilos y siempre quisiste llevarlos: ¡no dudes en hacerlo! Buscá el que más se adapte a vos, porque el abanico de posibilidades es muy grande. ¡No te quedés sin los tuyos!