¿Pensando en comprar un vestido de novia de segunda mano? 6 consejos imperdibles
Las novias que comienzan a explorar en vestidos de novia y se asustan de los precios o evalúan la puesta en escena de un atuendo sostenible tienen la oportunidad de conseguir un vestido de segunda mano, idea que puede resultar muy ventajosa.
Sin renunciar al sueño del vestido de novia, existen ideas que se extienden en el universo de las bodas como el alquiler de vestidos de novia o la compra de un modelo de segunda mano. Cualquiera de las dos propuestas resulta acertado para optimizar el presupuesto, pero además se puede hallar un diseño de primera marca a precios más accesibles casi imposible de comprar si fuera de estreno.
1. Vestidos más baratos
El factor que encarece las prendas es la primera puesta, ya sea cuando se trata de una compra o de un alquiler. Este elemento ya no existe cuando el vestido usado es una opción para otras novias. Por ende, la mayor ventaja de adquirir un vestido de novia de segunda mano es la reducción del precio original sin perder en calidad.
2. ¿Alquilar o comprar un vestido usado?
Aunque el vestido de novia ya tenga un uso, no se trata de diseños comunes, sino de vestidos confeccionados al detalle, en su mayoría prendas de valor y calidad. La diferencia entre alquilar y comprar en una tienda no va más allá del precio, pues los negocios se aseguran del buen estado de las prendas. Pueden surgir diferencias más notables cuando la compra se realiza con un particular y requerir algo de inversión para arreglos.
3. Vestidos sostenibles
Comprar un vestido de segunda mano es una opción válida para novias ecológicas. La sostenibilidad se traslada a varios conceptos de bodas, como las tarjetas, los objetos reciclados para decorar o los vestidos de novia de segunda mano. Hay novias que se han casado y prefieren recuperar el dinero colocando sus vestidos a la venta en tiendas o outlets. De la misma forma, también hay comunidades online para vender los vestidos a precios económicos.
4. Un vestido cuidado no pierde su esencia
Cuando las novias comienzan a valorar la idea de comprar un vestido usado, un factor negativo que puede nacer es la sensación de no lucir una prenda original de primera puesta o confeccionada a medida. Si el vestido se cuidó y está en perfectas condiciones, toda la mano de obra que lo encarecía, en ese momento continúa estando, solo que ya alguien lo lució antes. El vestido no pierde su esencia y gana una segunda vuelta.
5. Consejos para comprar
El proceso de búsquedas es similar a la compra de un vestido nuevo. Es importante dedicarle tiempo, porque las opciones van a ser más limitadas, ya sea por el estilo de vestido o por las condiciones de la prenda. Es vital revisar todos los detalles que hablan sobre los cuidados del vestido, como costuras, botonadura, puños y ruedo de faldas, y que haya pasado por la tintorería.
6. ¿Dónde comprar vestidos usados?
Las novias que no van a guardar sus vestidos de novia y los ponen a la venta tienen la tecnología a favor para elegir plataformas de compra y venta de artículos de boda de segunda mano. Publican un anuncio con fotos del vestido y otras novias tienen la oportunidad de comprarlo. Por lo general, las fotos que pueden verse son del día de la boda. Esto resulta útil para encontrar inspiración. Algunas webs ofrecen una comparativa del precio original y el precio final. Si no es la opción que buscabas, también hay tiendas físicas para explorar en diseños de segunda mano.
Algunas marcas lanzan colecciones de vestidos de novia low cost para que los gastos del casamiento no hagan posponer las bodas. Los vestidos vintage también son de segunda mano, con el valor agregado que les otorga la historia y el tiempo pasado.