8 momentos entre madre e hija muy emotivos que vivirás durante tu casamiento
El vínculo madre e hija es uno de los más sagrados que existen. Si bien cada relación es distinta, todas están marcadas por el amor y la admiración. Si te estás por casar, seguro vivirás con tu madre momentos como los que te contamos. ¡Atesoralos!
Las madres nos dan la vida y ese amor tan profundo se mantiene hasta en las ocasiones más difíciles. Casarse es un momento de tu vida que moviliza muchas emociones y más que nunca querrás que tu mamá esté a tu lado para acompañarte. Desde que le contaste que te vas a casar hasta el día del enlace, ella será una parte fundamental. Hoy te contamos algunos de los momentos increíbles que vivirás durante el hermoso proceso de un casamiento.
Mamá: ¡me voy a casar!
El día que te comprometés es un día trascendental para tu vida y especialmente para tu pareja. Pero todo termina cuando tu mamá se entera. Ese momento en que le contás de una de las decisiones más felices quedará para siempre en tu memoria. Para hacerlo más memorable aún, podés invitarla a cenar y allí contarle pronto serás una mujer casada. ¡Y que por supuesto querés su ayuda para organizar todo!
Agenda de madre-hija
Una pareja que se está por casar tiene por delante unos meses con muchas cosas para organizar. Pero por fortuna, podés contar con el apoyo de tu mamá para que todo sea más liviano. Enfocate en esos pequeños grandes momentos que tendrán juntas: armar souvenirs, escribir las tarjetas de casamiento y hasta cocinar juntas para el buffet.
La mejor elección
Uno de los momentos clave para una novia es el día que elige su vestido. Si bien la gran mayoría suele tener una idea del estilo nupcial que mejor le llevará, suele ser una decisión compleja de tomar. Para eso, tu madre será clave, porque conoce como nadie tus gustos y tu personalidad. Tenerla ahí, viendo cómo elegís con alegría tu vestido de novia será de un valor incalculable para ambas.
Vistiéndose con la más querida
El día de tu boda, además de tus amigas y de tus hermanas (si tenés), tu madre es una pieza crucial para el momento en que tenés que prepararte. Peinarte, maquillarte y vestirte será más fácil y más tranquilizador si se hace con la mirada llena del amor de mamá. Estamos seguros que cuando te vea por primera vez con tu vestido de novia, la emoción será compartida. ¡No pueden faltar los abrazos!
Escuchar palabras con sabiduría
Las madres siempre tienen la palabra justa en el momento justo. Seguramente querrá que tengan un momento a solas en el que podrá darte las palabras que calmen tus nervios, que te llenen de seguridad para tu boda, y que simplemente broten fragmentos del amor y de felicidad de verte cumplir tus sueños y de llevar a cabo tus propias decisiones.
Caminando juntas al altar
Si bien la tradición dicta que la novia ingresa con su padre a la ceremonia (sobre todo para las religiosas) podés elegir que sea ella quien te tome de la mano y te acompañe a convertirte en una mujer casada. Su fortaleza y su cariño hacia vos te harán sentir segura y encaminarte con confianza para casarte con la persona con quien querés compartir tu vida.
Primer baile
Al igual que con el punto anterior, tu primer baile puede también con tu mamá. Imaginate la escena: vos ya felizmente casada, con la persona que más te quiere en el mundo, celebrando la vida, bailando de alegría y fundiéndose en un abrazo que quedará en la memoria de ambas por mucho tiempo. Suena hermoso, ¿verdad?
Un discurso desde el corazón
Por último, y habiendo teniendo cientos de momentos hermosos con tu mamá en todo el proceso que conllevó la boda, podés pedirle que de un discurso para todos los presentes. La calidez de las palabras de una madre emocionará a todos los presentes.
Atesorar en el corazón y no solo en la cabeza los momentos con tu madre tiene que ser la premisa para atravesar los meses previos a tu boda y, por supuesto, el mismo día del enlace. Decile siempre que la querés y lo agradecida que estás de que ella sea parte de este gran momento de tu vida.