Qué llevar a la luna de miel

Hacer la valija para la luna de miel puede convertirse en toda una odisea. A menudo nos dejamos llevar por el conocido "por si acaso": un sweater por si acaso hace frío, un rompevientos por si acaso llueve, unos zapatos elegantes por si acaso surge una ocasión especial...

Para no olvidarnos nada y no llevar más cosas de las necesarias lo más importante es empezar a preparar la valija con una semana de anticipación:

Preparen una valija para cada uno

Así tendrán más espacio para los regalitos. Por otro lado, preparen una valija de mano para poner un par de mudas y cambios de ropa de cada uno. Así, si se pierden las valijas facturadas tendrán con qué aguantar por unos días.

Hagan una lista con las cosas básicas de higiene diaria que necesitan

Cremas, cepillo de dientes, jabones, secador de pelo... La noche antes metan todo en la valija. Si van a un destino de playa no se olviden el protector solar y el aftersun.

Preparen un pequeño botiquín

Lleven curitas, medicamentos para el dolor de cabeza y las digestiones pesadas, etc.

Separen la ropa que se pondrán durante el viaje

Les aconsejamos que elijan ropa cómoda y que lleven una campera o un sweater en el bolso de mano para no pasar frío con los aires acondicionados

Ropa para todo momento

Hagan una lista de todas las actividades que realizarán durante el viaje y analicen la ropa que necesitarán. Si van a pasar unos días en la playa preparen la malla, la toalla, ropa ligera y las ojotas. Para las visitas por la ciudad, lo mejor es ropa cómoda y de colores neutros, que pueda combinarse fácilmente entre sí. De este modo, reducirán al máximo el número de prendas y no tendrán problemas de espacio en la valija a la hora de volver. En función de la temperatura y el clima que haga en el destino elegido, deberán cambiar los pantalones cortos y las sandalias por la campera y las botas.

Atención a los zapatos

Los zapatos suelen ocupar mucho espacio. Les recomendamos llevar calzado cómodo y que combine fácilmente con la ropa elegida: unas zapatillas deportivas y unas sandalias, o unas botas para los que vayan a destinos fríos, serán suficiente.
 

Revisen los pasajes de avión

Y todos los documentos necesarios: documento de identidad, pasaporte, tarjeta de crédito, reservas de hotel, etc.
 

¡No se olviden de la cámara de fotos y de vídeo! Y asegúrense de llevar los cargadores de batería.