Hace unos años ya que llegué a este mundo loco y divertido de la fotografía, esto se lo debo a una gran amigo. Después de ir y venir, porque no lograba animarme a dar el gran paso, al fin encontré mi momento, mi mundo mágico, el de los fotógrafos de Bodas, este universo donde todo y lo más importante termina sellándose con amor.​

Me capacité de diferentes formas, al principio fueron muchos cursos, con el tiempo lo que más me ayudó fue asistir a Congresos Internacionales, Seminarios y Workshops de potenciales fotógrafos de Bodas de Argentina, España, Estados Unidos, México, Brasil, Chile y Venezuela.

Disfruto cada momento en una Boda, ya que todo es felicidad y los momentos de felicidad es todo lo que nos llevamos, los nervios de la previa, el mirar de unos ojos llenos de lágrimas, manos con desesperación por ser acompañadas, niños corriendo, el religioso mirando la hora, sonrisas cómplices, palabras llenas de adoración mezcladas con nervios, pero sobre todo el amor que flota en el aire.

Estoy completamente seguro de que algún día el universo pedirá que de algo de mí, soy un bendecido, soy esa persona que busca grabar recuerdos en imágenes, imágenes de momentos especiales, únicos e irrepetibles, momentos de felicidad, que no solo son de ustedes, sino que también son míos, soy el que plasma en una imagen el recuerdo que durará todo la eternidad.

Mi objetivo principal de fotografiar es que al pasar el tiempo veas esas imágenes y éstas les lleven a ese momento, que sientan y recuerden el calor de la gente, el olor del perfume, los nervios, la risa... quiero llevarlos a ese día y que vuelvan a sentir todas aquellas sensaciones.

Soy un contador de historia en imágenes de uno de los días más importante de una pareja.

Soy Nicolás, de Mendoza. Empecé a editar videos de eventos hace varios años atrás y luego decidí crecer profesionalmente filmando bodas. Para mí el video es algo tan indispensable en un evento que necesita su mirada particular. Me encanta capturar emociones y momentos, para luego seleccionarlos y unirlos en un solo trabajo final. Actualmente trabajo con amigos, Juan Manuel Romanisio y Eduardo Larra, y tenemos como misión ofrecer lo que mejor sabemos hacer: contar historias de amor. Proponemos realizar el trabajo de la mejor manera: con una gran calidez humana, creatividad y gran profesionalismo.

Mi pasión por la fotografía y el cine hizo que se convirtiera en mi profesión. En tan solo 6 años esta actividad me llevó a recorrer varios lugares y poder trabajar en cine, publicidad, televisión y eventos sociales y aprender de personas con mucha experiencia.

Así fue como descubrí la videografía de Casamientos. Con más de 100 bodas realizadas y trabajando junto a grandes profesionales del rubro fui aprendiendo a transmitir en mis imágenes uno de los días mas especiales de la vida de una pareja.

Apasionado de la montana y la música, soy tranquilo y relajado, la sencillez y el minimalismo es lo que me atrae. De esta forma logro una identidad propia en mis videos.