El casamiento de Agustín y Magalí en Mocoretá, Corrientes

Y bueno... de repente llegó el gran día. Esa mañana llegaron los ultimos invitados desde Capital y Pehuajò. Desayuné con ellos y me fui corriendo al salón con una amiga a terminar de preparar los dulces. Comí a las apuradas y me tiré a descansar un ratito y a las 17 ya estaba lista para ir a maquillarme y después a las 19:00 peluquería y bueno a las 21:00 era el horario pactado para la ceremonia religiosa pero el cura nos dijo que se le complicaba y que por las dudas si yo podia llegar un poquito más tarde mejor. Finalmente mi mamá me ayudó con el vestido, mi hermano me ayudò a colocarme el velo y fue quien me llevó a la iglesia en su auto decorado con unas bonitas mariposas de colores. Llegò el momento, me temblaba todo y no me temblaba nada, era todo nervios y felicidad.

Primero entraron tres de nuestras sobrinas con los anillos y después yo del brazo de mi papá. En el altar estaba el hermoso, más lindo que nunca jamás. La ceremonia fue breve, pero tuvimos momentos de de panick atack al no poder sacar los anillos y al colocarlo, el mío casi no entra. Una vez que llegó el momento del beso todo fue felicidad, chau nervios hola felicidad total. De ahí caravana por el Mocoretá y Fiesta Fiesta que con todo y sus bloopers fue inolvidable.

Disfrutenla, disfruten todoo, cada segundo vale la pena. Lo más cómico de la nuestra fue que justo cuando estaban por anunciar nuestra entrada se cortó la luz en todo el pueblo y los que estaban a cargo del Grupo Electrógeno no sabían bien como debían hacerlo arrancar, por suerte uno de los amigos de mi marido es electricista y nos dio una mano en eso, pero nos valìó para hacer una foto divertida. El corte sólo durò 15 minutos que finalmente sirvió para que llegaran unas amigas que habían ido caminando desde la iglesia al salón (8 cuadras) y otros que se habian fugado a terminar el video de los invitados que no habian podido ir y que mandaron su video ese día a las 20:00 (cosas que pasan). Después volvió la electricidad y arrancó la fiesta. Entramos con "Sugar" de Maroon 5, en nuestra imaginaciòn entrábamos, nos saludaban y bailabamos el vals... pero algo salió mal y nadie se acercò a saludar (en realidad todos nos saludaron y charlaron con nosotros a la salida de la iglesia) y bueno, tras debatir un segundo de miradas sostenidas nos pusimos bailar y les mostramos a todos lo lindo que bailamos. Después bailamos con hermanos, sobrinos, amigos y puedo seguir escribiendo por horas, pero en si fue todo genial, un recurdo maravilloso.